Soy Sara Fernández, Diplomada en Logopedia por la Universidad Pontificia de Salamanca. Continué mi formación en el Hospital de Sant Pau de Barcelona realizando el Máster de Práctica Clínica y convirtiéndome también en Maestra de Lenguaje y Audición en la Escuela Luis Vives de Salamanca.

Pero la formación de una logopeda no acaba nunca, así que acudo a diferentes cursos y congresos siempre que puedo. Sin olvidar mi faceta autodidacta.

Con casi 20 años de experiencia mi recorrido profesional empieza en Bilbao, pasando por trabajar durante varios años en Vitoria en una consulta de foniatría y culminado en San Sebastián, dónde ejercí mi vocación tanto en la Clínica Quirón como en mi consulta privada.

El tener la responsabilidad de ayudar a alguien que deposita su confianza en mi, de tratar de mejorar su calidad de vida es un gran compromiso. De eso soy muy consciente. Así que mi dedicación a cada persona es única. Mi actividad está orientada a cubrir tus necesidades concretas. Siempre con la empatía, sinceridad y afecto que todos merecemos cuando tenemos un problema.
Además estoy en contacto con otorrinos, foniatras, ortodoncistas y centros escolares con el fin de coordinarnos y obtener los mejores resultados.

En la intervención con niños trabajo las dificultades en la comunicación, el lenguaje, el habla, la voz o las estructuras orofaciales que presente tu hijo/a desde un enfoque integral a lo largo de su desarrollo. Detecto y evalúo sus dificultades de comunicación y funciones orales. Preparo un plan de intervención diseñado exclusivamente para tu hijo/a, para lograr rehabilitar o estimular las funciones comunicativas del lenguaje oral y escrito, de la voz, del habla y de las funciones orales asociadas (respiración, masticación y deglución) Proporciono la orientación y asesoramiento familiar y escolar que se necesite.

La intervención con adultos es semejante pero la actuación se centra más en patologías de la voz, en la voz profesional (profesores, cantantes, comerciales…) en el tratamiento pre y post operatorio de posibles lesiones en las cuerdas vocales. Sin excluir trastornos orofaciales, problemas articulatorios o de fluidez del habla como la disfemia (tartamudez).